lunes, enero 11, 2010

nieve 3

Mientras volvemos a casa y ensuciamos con nuestras botas el hielo desmenuzado de las calles, crece la evidencia de que sólo las ramas metálicas de las acacias sabrán guardar la blancura o la pureza de la nieve, su neutra fragilidad.

1 comentario:

Isabel dijo...

Cierto y bello, por supuesto.